La rabia incompleta

cama-vacía

Un fan­tas­ma inten­tan­do arran­car­se la sábana de la cabeza al des­per­tar se vería mucho más ágil y resuel­to que esa mujer fusion­a­da al colchón. La risa del des­per­ta­dor agu­jere­a­ba su real­i­dad y la suc­ciona­ba de nue­vo a esta pesadil­la irri­tante y sin gra­cia. Unas salmodi­antes notas en morse abrían la com­puer­ta de un tobogán que […]